El Tejo

El Tejo (Texu, en asturiano) es uno de los árboles más longevos del mundo y en nuestra región se encuentran ejemplares de hace más de 200 años. Son propios de zonas montañosas y suelen crecer aislados. En la próxima excursión que hagamos a la zona de Quirós os fotografiaremos el de la Iglesia.

Este que veis arriba tiene unos 15 años. Ahora se encuentra lleno de bayas rojas y está realmente bonito. No todos los tejos dan frutos pues hay ejemplares masculinos y femeninos.

Como sabréis todas las partes del árbol son muy venenosas y únicamente la carne roja de las bayas es comestible aunque mejor no probarla.

Se reproducen por semillas aunque tardan varios años en germinar. Aconsejan, antes de plantarlas, tenerlas varios días a remojo en agua fría y luego mantenerlas húmedas durante un largo periodo de tiempo hasta que germinen.

Curiosamente los ejemplares que veis provienen de plantas nacidas bajo uno ya grande. Se extraen con cuidado de la tierra y se trasplantan primero a una maceta en donde crecen sin problemas durante cuatro o cinco años.

Hay infinidad de leyendas sobre este árbol, considerado "mágico", que en otro momento os contaremos. Además está probado que el taxol, una sustancia que se encuentra en la corteza, tiene propiedades anticancerígenas.